La inocencia,,,,,,echa verbo maldad, no se sabia qué era vivíamos en el castillo de Arrayanes, encerrados en el único castillo que conocíamos, la ciudad la veíamos de lejos, lujuria, nos sonaba a titulo de película. Una tórrida tarde de agosto nos metimos al frescor de debajo de la cama para dejar dormir la siesta a los mayores. Pero claro,,,, no es lo mismo la inocencia de los nueve años que los dieciséis lujuriosos llegados de Madrid. ¡¡ dejad la fantasía de un niño¡¡ no marquéis para…